La presencia de polvo o gas inflamable en el ambiente que rodea la carga a ser levantada será absorbida por el sistema de vacío y conducida a través de tuberías, filtro y bomba. Para garantizar la seguridad, es esencial realizar una planificación meticulosa en la selección y ubicación de cada componente, tomando en cuenta que cada uno puede ser impactado por la zona ATEX, aunque no esté ubicado en su interior.

En un sistema de vacío ATEX, la ubicación de la bomba de vacío es crucial y debe ser cuidadosamente considerada. La bomba se encarga de purgar el aire y atraer la atmósfera explosiva en la ventosa, lo que hace que su colocación sea aún más importante que en un sistema de vacío estándar. Aunque instalar la bomba fuera de la zona ATEX o en una zona adyacente puede ser conveniente para reducir ruido o ahorrar espacio en un área limitada, esto no elimina ni reduce la necesidad de una bomba de vacío certificada para la zona ATEX correspondiente. La atmósfera explosiva puede viajar a través del interior de la bomba, lo que significa que es esencial proteger la bomba del riesgo de ignición y asegurarse de que esté aprobada para una temperatura específica. Es importante tener en cuenta que los requisitos son más elevados en las zonas 1 y 21 que en las zonas 2 y 22.